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Me resulta incomprensible que en México el género del terror sea tan poco explorado en el cine, y que las pocas producciones de género intenten ser copias de fórmulas estadounidenses, fallando en el resultado la mayoría de las veces. ¿Por qué buscamos el miedo en otros lados, cuando el verdadero terror vive en nuestro propio país? Vuelven.

Vuelven es un cuento fantástico situado en la tenebrosa realidad de México, un lugar donde los monstruos no se esconden debajo de la cama, si no que se encuentran durmiendo plácidamente sobre ella impunes de sus crímenes.

En este casi cuento de hadas, un grupo de niños a quienes el crimen organizado ha vuelto hijos de la calle, son los encargados de vencer a esos monstruos de carne, hueso y nexos políticos.

La directora mexicana Issa López ha construido un relato sobre la pesadilla mexicana de las desapariciones cotidianas por el narcotráfico, contado desde un punto de vista diferente, uno más esperanzador pero no menos aterrador.

Los elementos sobrenaturales dotan de un realismo mágico a la historia protagonizada por niños (íconos de la esperanza) que son enfrentados a una cruda realidad que carcome su mundo infantil de fantasía, tal y como desgraciadamente sucede en muchas partes del país.

El guión es verdaderamente genial en la manera en que construye la historia, enfatizando momentos clave para la construcción de la relación de los personajes entre ellos y con su entorno. Destaca la magnífica metáfora que López crea con el tigre y su naturaleza transgredida por el humano, haciendo del final algo poético.

La habilidad de la directora es destacable, pues no solo logra sacar grandes actuaciones a su grupo de niños actores (algo complicado de lograr), además logra impregnar de credibilidad cada escena de terror (apartado en donde la mayoría de los directores de género fallan), saltando con gran agilidad del drama a la comedia sin perder el tono del relato coming of age fantástico.

Vuelven es una muestra de cómo lograr una gran película de horror con poco presupuesto y que la falta de recursos monetarios sea opacada por la riqueza de recursos imaginativos. En esta película hay fantasmas y criaturas sobrenaturales, pero se muestran sólo lo suficiente, y esas cortas apariciones están muy bien realizadas gracias a unos sobresalientes efectos especiales. No hay pecado en utilizar las sombras para cubrir la escasez de presupuesto cuando tu película lo hace de manera magistral.

Quizá el único punto débil sea la falta de pausas dramáticas, puesto a que varios momentos cumbres de la película pasan muy rápido, pero esto es cuestión de práctica para que su directora lo domine o lo vuelva parte de su sello personal. Esperemos que Issa López ahora que ha explorado el género, no lo deje nunca.

Se dice mucho que apoyemos al cine mexicano, yo siempre he dicho que se apoye al buen cine, venga de donde venga, pero con Vuelven si les puedo decir que apoyemos a este cine mexicano, fresco, de propuesta distinta y sobre todo bien hecho. A este cine mexicano sí es un placer apoyarlo.

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