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Fuimos al concierto de Pedropiedra y te traemos la reseña de una noche cargada de pop rock y folk traído desde el austral.

Fotos por: @edgarsagra

Llegamos al Lunario para disfrutar de una noche del pop rock folk de PedroPiedra y nos llevamos una grata sorpresa al ver que el vocalista de Jumbo, Clemente Castillo, sería el que abriría el show.

La noche dio comienzo con tracks del Eureka, primer álbum solista del regiomontano que nos demuestra que hay una vida después de Jumbo, con un estilo un tanto renovado a lo que veníamos escuchando, pegajoso y con buena ejecución.

Con un tal de 9 canciones y entre ellas un cover a Los Fabuloso Cadillacs en uno de los tracks más representativo del ska/reggae, Calaveras y Diablitos, concluye su presentación en el Lunario del Auditorio, con un show íntimo de rock pop acústico que nos muestra una nueva etapa del regiomontano que, para muchos, fue la mejor opción para reinventarse en el mundo de la música.

En un lugar en el que la chela no sale del bar y venden bebidas sin alcohol en la sala de conciertos, se aproximaba la hora para escuchar al cantautor chileno con su rock pop folk que tanto disfrutamos, en un noche que promete ser mágica y cargada de buenos versos y ritmos.

Las luces se mantenían apagadas cuando de repente salieron los músicos de tan anhelada noche, PedroPiedra con una playera roja y pantalón blanco con parches, Jorge Delaselva con su pendiente y usando un animal print, los demás integrantes de la banda se dirigieron a sus lugares y así dieron pie al concierto al tocar Lluvia sobre el mar, una rola que estrenó video hace unos meses y que los presentes siguieron al vaivén del estrepitoso silbido.

Una rola que prendió desde el principio y Pedro anuncia la segunda rola de la noche, Pelusita, una rola más del Ocho que tiene unas liricas muy buenas y en la que se avienta su freestyle.

La banda prendida y sin chela estaba escuchando los nuevos tracks del Ocho, Pedro toma la guitarra acústica y empieza con rasgueo que la banda reconoce, Jorge Delaselva deja la guitarra y la sustituye por una flauta y acompañar a Pedro en una de las rolas mas coreadas de la noche La Balada de J. Gonzalez. La banda bailaba, brincaba y coreaba al unísono del recinto “¡Perú no está tan lejos hijo mío!” “¡Compositor!”

Después de hacernos bailar y tener a la banda extasiada, la banda decide tocar Las niñas quieren, un clásico de su disco homónimo que nos hizo disfrutar de los sonidos del ayer que han captado la atención del mercado mexicano.

Todos pensaban que seguiría una rola un poco más tranquila por la anterior pero no. Las luces se centran en Jorge Delaselva que anuncia la quinta rola de la noche, con su grito gitano que la caracteriza que unió al Lunario y dar pie a una de las mejores rolas del Emanuel, Para ti!. Tocando un momento relax para después alocar a la banda con sus versos complejos y claro, su “por supuesto que sí”.

La noche siguió con buenos riffs que rebotaban en las paredes, y así sonaba Al Vacio, como sexto invitado de la noche.

Llega el momento romántico, toma su saco con parches y vislumbramos que tiene uno de Don Ramon jejeje, toma el micrófono para hacer la invitación a tomar a su acompañante o al de a lado para entonar una rola que te incita a cantarle astro nocturno, Luna Luna. Pero como dice, “los que más saben viven en la luna”, una canción que en presentaciones anteriores contaba con los coros de Mon Laferte.

La garganta se reseca y pensamos seriamente en ir por un trago cuando se escuchan los acordes de En esta Mansión, una rola que no habíamos escuchado en otros conciertos que forma parte del Cripta y Vida. La banda se identifica con el momento y corea toda la rola, cuando escuchamos que unos fans (con playera gorra y todo) dicen que esa rola no es del agrado total del cantautor chileno. ¿Sera?

Pedro anuncia la siguiente rola, y dice que es un tributo a un personaje del noticiero más verás de la televisión chilena, Mr. Guantecillo de 31 minutos, la banda grita y baila al country original de la rola y con la gran interpretación del cantautor y baterista de 31 minutos.

Después de un country llega el momento de bailar con un psicodélica, se anuncia el clímax de la noche cuando interpretan Rayito / Olita, la banda baila y rapea con Pedro y se unen en el grito “Yo no quiero estar tan solo, ay ay ay ay”.

Las ganas de una chela se agudizan en la sala y de repente la banda sale, solo queda el intérprete chileno, toma su guitarra y el ambiente se envuelve en una esfera romántica cuando toca Sol Mayor, viejo conocido de su primera producción. La banda coreaba “Sera porque somos dos animales males males males”, “será porque somos dos vegetales tales tales”. Y le bajaron dos rayitas a la energía de los presentes.

El break de la banda termina y regresan al escenario para acompañar a Pedro en Occidental, una rola que se el público identifica de inmediato del cripta y vida, todos coreando “Occidental, imitando mal vuelo de pájaros, sentimental sin una razón sobre los árboles es lo normal”.

El beat de la noche estaba bajo, hacía falta una rola que nos volviera a prender, suenan los primeros acordes de Pasajero y la gente revive estrepitosamente, todos saltando y coreando “Pasajero, pasajero viaja pero nunca llega” “búscate un planeta que aquí la fiesta está que arde!”, el detalle de la noche fue cuando un fan estira la mano hacia el cantautor chileno para entregarle un CD, Pedro lo toma y lo firma en plena canción, seguramente suma puntos con los fans.

Con la banda prendida de nuevo Pedro aprovecha el momento y cuenta la historia de cuando llegó a la CDMX, contó que tuvo la fortuna de que una gran persona le abriera las puertas y en ese momento anuncia a Mauricio Durán de Los Bunkers para interpretar Ay Ay Ay Ay.

Todo iba de maravilla, un invitado de lujo y se escuchan los acordes del segundo plomazo que nos dejó con la boca abierta, unos de asombro y otros de desconcierto. Suena el cover de Have you ever seen the rain, en ese momento no sabíamos como interpretarlo pero nos dejamos llevar. Pues nuestra cabeza paso un episodio de los Simpson en donde Homero dice “te va castigar Jebus”. Pero momentos después rescató el momento al cantar era tu vida.

Pedro anuncia el siguiente track y al mismo tiempo hace la invitación a Piluso para interpretar la rola que puso a bailar el recinto hermano del templo de reforma, en el escenario tenían una fiesta y en la pista todos sacando sus mejores pasos al ritmo de Todos los días, un track muy bailable que en verdad te hace mover los pies con su ritmo pegajoso pero muuuuy bueno.

Con la pila al 100 ya sin la necesidad de una chela nos dispusimos a seguir la fiesta y con la siguiente rola que movió todos los sentidos de los presentes al unirnos en paz y baile al ritmo de Vacaciones en el más allá, toma otro disco y lo firma en plena rola y posteriormente presenta a la banda, pero en cada nombre los mata (simbólicamente) y caen al suelo y al final se suicida con agua. Y así dan por terminado el primer bloque.

Bajan las luces y el público los corea, pensamos en salir por una chela pero se encienden las luces y Pedro anuncia Loco. Con su guitarra solo en el escenario dedica a su hijo que cumple años la canción de Loco. Recordemos que en una entrevista con Bizarro nos habló de esa canción y nos dijo “Es una cancioncita muy corta, de 2 minutos. Es la que más se sale del disco. Es sencilla, tiene muy pocos elementos. En esa canción le estoy hablando a mi hijo de 3 años.”

La noche está llegando a su fin e interpreta una de las rolas más pedidas en redes sociales, Lima del Emanuel. Todos corean “no es crimen si no hay testigo”.

Anuncian la última rola del Ocho, y agradecen sus seguidores, y toca su favorita Matando el Tiempo, como alguna vez comentó en entrevista “Si tuviera que elegir sería Matando el Tiempo. Es la canción que más dura del disco y la más larga que he firmado. Engloba el sentimiento general del disco, de la vida en la ciudad. Me gusta la letra, los arreglos, es como medio euroflamenca-andina.”

Llegó el momento de concluir la noche y lo hace con una gran rola que le ha dado mucho empuje en el mercado mexicano, con un hip-hop rock se despide del público mexicano que se une con las manos en el aire para entonar el tema emblemático de la banda Inteligencia Dormida.

Un concierto que cumple y cubre las expectativas de fans y no tan fans, tal vez un resbalón con la rola de los CCR, pero fuera de eso, una noche de buenas lyrics, acordes y gran ambiente al puro estilo del pop rock folk austral de PedroPiedra.

Cuéntanos, ¿qué te pareció el concierto? ¿Cómo lo viviste? ¿Te esperaste al final para que te firmara tu ticket? ¿Qué le falto? Paz y baile…

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