Minor Victories, una súper banda nacida a fines del 2015 y que hasta ahora, en esta mitad del 2016 nos trae oro para nuestros oídos, oro puro y de varios kilates para escuchar.
Oficialmente hemos entrado a la recta final del primer semestre del año. ¡Jodido tiempo, corres muy rápido! Y en esta mitad del año nos hemos llevado unas cuantas decepciones en cuestiones de la música, pero aún más que eso, muchas grandes sorpresas.
Insisto, vas bien 2016. Te estoy queriendo mucho.
Cuando hablamos de las llamadas súper bandas, nos vienen a la mente nombres como: Them Crocked Vultures, The Dead Weather, Moderat, Audioslave, The Raconteurs, Velvet Revolver, Atoms For Peace Last Shadow Puppets, y un largo etcétera más.
Pregunta: ¿Y porqué les llamamos súper bandas?
Respuesta: Bueno, básicamente por que eso es lo que son; bandas conformadas por integrantes y/o ex integrantes de otras bandas ya consolidadas y bien posicionadas en la música. Son integrantes que por algún descanso, o simplemente por salir un poco de lo monótono y de la rutina en su banda primordial y ya consolidada, deciden juntarse con sus otros amigos talentosos de otras bandas consolidadas que están en el mismo caso. Es así como surgen las súper bandas.
El ser una súper banda no quiere decir que ¡Wooow, su música está padrísima! (la verdad es que casi siempre sí), pero algo que es 100% real es la calidad de la música que ofrecen a sus oyentes, ¿por qué?, porque ya son unos genios consolidados.
Este es el caso de Minor Victories, una súper banda nacida a fines del 2015 y que hasta ahora, en esta mitad del 2016 nos trae oro para nuestros oídos, oro puro y de varios kilates para escuchar.
Minor Victories es una banda británica conformada por:
Rachel Goswell; vocalista de Slowdive que recientemente visitó nuestro país. Guapísima y que bella voz tiene. Stuart Braithwaite; guitarrista principal de Mogwai que aquí también la hace de a vocalista. Justin Lockey; bajista de Editors y que aquí le hace de a guitarrista y el que juega con los juguetitos electrónicos. James Lockey; bajista hermano de Justin y creador de clips de cine.
Ahí nomás para que se den un quemón con los integrantes.
Este álbum homónimo de Minor Victories cuenta con 10 canciones y una transición fabulosa entre canción y canción.
Comenzando con Give Up The Ghost, mostrando las voces de Rachel y Stuart bajo una lírica un tanto deprimente y el claro sonido referente del shoegaze que cada uno de los integrantes de las tres bandas representa y lleva muy marcado.
Una pieza buenísima es la segunda pista, A Hundred Ropes, el segundo sencillo que se desprende de este álbum y que muestra a Rachel en solitario con el comienzo de una secuencia electrónica para terminar con riffs de guitarra y violines intermedios. Gran letra de A Hundred Ropes que nos dice, en resumen, superar los problemas trágicos que nuestras vidas conlleven.
Breaking My Light, el primer sencillo (¿o el tercero?), donde Rachel aparece de nueva cuenta en solitario con su voz acompañada de unos suaves acordes de piano, de violín y de guitarra y con la batería un tanto aumentada en algunas partes.
Otro de los sencillos es Scattered Ashes (Song For Richard), otra de las más chidas y sobresalientes. Un tema de desamor que, supongo se la cantan a Richard…supongo, un Richard que evidentemente no tenemos idea quién es.
Lo que es un hecho es que esta canción suena tremendamente cabrona cantada por Rachel y Stuart al mismo tiempo. Es dinamita.
Cabe destacar también que este track cuenta con un vídeo en blanco y negro bien genial de un gatito gigante atacando y destruyendo una ciudad con rayos láser saliendo de sus ojos, eso entre otras armas letales. Hasta abajo de este texto se los pondré para que lo chequen y se enamoren del vídeo y la canción.
Folk Arp es otro de los cuarto sencillos, es una balada donde los Minor Victories se ponen románticos y donde nuevamente Rachel canta en solitario con su bonita voz de señorita güera, aunque esto último no sé que tenga que ver.
Uno de los tracks más energéticos es Cogs, que le abre paso a el track más interesante en cuanto a la letra se refiere, For You Always; con ese título bien podría ser una canción de amor, y lo es, en parte. Aquí Rachel y Stuart toman turnos rolados entre las estrofas contando su historia de amor y la gran conexión que existía pero que no pudo ser ya que ambos contaban con noviazgos, pero aún así diciéndose ambos que contarán con su apoyo en lo que sea, ¡pff….muy fuerte!
Esta ‘platica’ está muy bien ambientada con melodías envolventes creadas por Justin Lockey y sus juguetes electrónicos.
Vuelvo a repetir: tal vez no sea la mejor canción del álbum pero si la más interesante en cuestiones de letra.
El shoegaze mas puro se aparece otra vez en Out To Sea, con riffs de guitarra larguísimos y ambientada con Rachel en un tono muy bajo.
The Thief es otro track dominante, perfectamente estructurado que va de un sutil y suave sonido al escándalo pero nada perturbador ruido de Minor Victories. The Thief es de esos tracks que estaría muy bueno escucharlo en vivo.
Minor Victories cierra su debut con Higher Hopes y su letra que te muestra lo difícil y arriesgado que es entrar en la etapa de una relación, las esperanzas que depositas en una persona para que no te dañe y se gane tu confianza, eso es Higher Hopes, eso es lo que te canta Rachel desde un inicio bajó hasta el estruendo. Una canción que bien podría incluir Slowdive en su repertorio y nadie lo notaría.
El debut de Minor Victories demuestra lo que es ser una súper banda; las ideas avanzadas de los integrantes, el cómo se pueden acoplar perfectamente en una nueva etapa para ellos. Es la perfección que los años exitosos en la música les ha dado. Y eso hay que agradecerlo mucho a los músicos.
Minor Victories con sus súper estrellas se encuentran actualmente de gira por Europa presentado su disco. Rachel visitó por primera vez México hace unos meses con Slowdive en Festival Nrmal dando un show espectacular y pueees…no sería mala idea que nos visite de nuevo ahora acompañada con estos chicos maravilla.
(¡Hey Corona Capital, ya pelame güeeeey!)
Como sea, este es otro álbum que se colgará a lo mejor del año. Está cantadito, literal. Y si no me creen, ¿qué esperan?, vayan a escucharlo.